Así se
hace un remake
Nueva
versión del film homónimo dirigido en 1980 por Tom Holland. En esta ocasión
dirige Craig Gillespie ( Lars y una chica de verdad) y protagonizan Anton Yelchin, Colin Farrell, David Tennant, Imogen Poots, Toni Collette y Christopher Mintz-Plasse.
Durante su último año en el instituto, Charlie Brewster (Anton Yelchin) parece que por fin ha alcanzado todos sus objetivos: es uno de los estudiantes más valorados y sale con la chica más deseada del centro. Su popularidad es tal que ha comenzado a dejar de lado a su mejor amigo. Sin embargo, cuando Jerry (Colin Farrell) se convierte en su vecino, aunque, al principio, le parece un tipo genial, con el paso del tiempo empieza a percibir en él algo extraño. Desgraciadamente nadie, ni siquiera la madre de Charlie (Toni Collette), se da cuenta de nada. Después de observar que en la casa de Jerry pasan cosas extrañas, Charlie llega a la conclusión de que su vecino es un vampiro que se sirve del vecindario para cazar a sus presas. Ante la incredulidad de los demás, el protagonista deberá ingeniárselas para deshacerse del monstruo por sí solo.
Gillespie
se aleja del tono cómico de la versión de los 80 y realiza un film de terror
con (espectaculares) set-pieces de acción . La acción comienza directamente, el
prólogo es uno de los ataques de Jerry, y la narración va directa al grano:
Jerry se instalará en la casa de al lado, en una urbanización cerca de las
Vegas donde empieza a desaparecer gente. Al principio adopta el tono de un
relato estudiantil juvenil ( con la ya necesaria presencia de Christopher
Mintz-plese) para luego pasar a un relato de terror puro. Además incluye una
interesante lectura sobre la actual situación socio-económica de la sociedad (
la acción está situada en un conglomerado de casas cerca de las Vegas, la mayor
parte vacias).
Cuenta
con un interesante plantel de actores donde destacan Yelchin ( ojo con este
chaval y la carrera que está cogiendo) y, sobretodo, Colin Farrel en su
encarnación del vampiro Jerry, un chupasangres
seductor y atrayente en la línea del Eric de True Blood.
El
mayor problema del film es Peter Vincent y su descripción. Aquí encarnado por
David Tennant ( la penúltima encarnación del Doctor Who) muy sobreactuado.
Difiere mucho del Peter Vincent de los 80 pues aquí es un mago que realiza
espectáculos vampíricos simulados en las Vegas. Además es un coleccionador de
reliquias relacionadas con vampirismo debido a que sus padres fueron muertos
por un vampiro el cual será ( en un giro de guión sencillo a la vez que
pilladísimo por los pelos) el propio Jerry.
El
relato está muy bien rodado por Gillespie, en su primera cinta de género.
Sorprende sus escenas de acción: el acecho a la casa de y su posterior huida
por la autopista; la doble lucha en el piso de Peter Vincent y la lucha final
en la guaridad de Jerry. Asimismo planos muy estéticos, como la bajada en ascensor de Yelchin en su primera visita a Peter Vincent, con un halo épico inesperado.
A
destacar también la música de Ramin Djawadi (autor de la celebrada Juego de Tronos) y la fotografía de nuestro maestro Javier Aguirresarobe ( ya instaurado en la industria americana).
Un film respetuoso con el original de los años 80, a la vez que bien rodado y sin pretensiones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario