Siempre
estaremos bien, mientras estemos juntos
Como
suele pasar en Hollywood cuando una idea o personaje o corriente se
pone de moda, varios proyectos diferentes salen a la luz a la vez y
este año ha tocado ser el centro de atención al llamado ( unos
dicen que mal, yo creo que el cine de suspense, y el séptimo arte
por extensión, le deben mucho ) maestro del suspense Alfred
Hitchcok. Así tenemos dos films, , la curiosa pero insuficiente
Hitchcok (
Sacha Gervasi, 2012 ) sobre su relación con su esposa Alma Reville
con el rodaje de Psicosis en el fondo y la TV-Movie The
Girl ( Julian Harrold, 2012 ) sobre el
rodaje de los pájaros y su tormentosa relación con su actriz
protagonista, Tippi Hedren. Pero la ficción entorno al director
inglés y su obra no acaba ahí, pues ahora tenemos una nueva serie
creada por Carlton Cruser ( showrunner de Perdidos ) para el canal
A&E que quiere funcionar a modo de precuela de Psicosis, obra
maestra del 60 y precursora del género slasher.
Norman
( un discutible Freddie Highmore ) descubre a su padre muerto en el
garaje, algo que le afectará en el futuro, mientras que a su madre
Norma ( una muy correcta Vera Farmiga ) parece no afectarle demasiado
la perdida de su marido. Mudanza tras mudanza acabarán comprando un
pequeño motel de carretera con una mansión justo enfrente ( ganado
en una subasta ). Norman se aclimatará a la vida en su nueva
escuela, para desconcierto y negación de su posesiva madre mientras
ésta será atacada por el familiar del terreno embargado. Esa
tragedia, de la cual se saldrán triunfantes aun con varios sustos (
como la visita del sheriff de la ciudad ) unirá a madre e hijo.
Este
proyecto nace del éxito de ese mix del cine de terror y fantasía
que es American Horror History ( FX, 2010- ) donde después de una
primera temporada llena de humor negro y una segunda aún más oscura
pero que en sus cuatro últimos episodios ha encontrado un discurso
propio que la elevan a una de las mejores y/o más interesantes
series del momento por obra y gracia de su creador, Ryan Murphy. A&E
quiere darnos una serie basada en los
personajes de una película mítica y con misterios de por medio (
ese extraño cliffhanger/ escena misteriosa final ), con un piloto
bien dirigido, de la mano de Tucker Gates, hombre de confianza de
Custer que ya estuvo en Perdidos ( no es el único: tenemos a actores
de aquella como Nestor Carbonell) pero con un par de temas a mi
parecer harto polémicos. Además se une a la corriente de series
protagonizadas y/o con asesinos en serie ( suponemos que este show
será la descripción de la formación de la mente psicótica de
Bates ) como la irrisoria The Following
de FOX o el inminente estreno de
Hannibal de la NBC. Los asesinos en
serie están de moda.
Primero
tenemos al reparto donde Freddie
Highmore me causa tanto acierto como
enfado : si bien se parece físicamente a un rejuvenecido Anthony
Perkins y el actor encarna bien esa
fragilidad y desconocimiento de la vida provocados por una posesiva
madre, me choca ver en el papel al joven actor de Charlie
y la fábrica de chocolate o
Descubriendo Nunca Jamás. Además ese
dibujo del mismo personaje, que primero se hace amigo del grupo cool
del colegio para acabar haciendo amistad ( y algo más en el futuro )
con la otra chica asocial del cole, una chica enferma, me parece
harto tópico y equivocado, como una muestra de sus problemas
sociales pero demostrado de manera burda e innecesaria. Por el
contrario funcionan bien sus escenas con su posesiva y celosa madre,
encarnada con convicción por Vera
Farmiga, excelente actriz de carácter
vista en Infiltrados, Up in the air, por ejemplo. La actriz cumple en
su descripción de su personalidad fría y posesiva, y mantiene una
buena química con su hijo. En papeles secundarios encontramos a
actores como Mike Vogel
( criadas y vecinas, la cancelada Pan Am ) o el ya citado Nestor
Carbonell ( Lost, El caballero oscuro
).
Pero
el aspecto más polémico y que hace que el poco o nulo interés de
la propuesta se pueda diluir, es el de situar la acción EN LA
ACTUALIDAD. O sea la serie quiere ser una precuela de una historia
ambientada en los 60 y su acción tiene lugar en 2013 ( con
comentario sobre la crisis económica incluido, por si no te habías
dado cuenta ), pero mantiene decorados de la película original y que
resultan anacrónicos o fuera de lugar, como el viejo motel y la
mansión o el vestuario de la madre de Norman. Ves esos elementos y a
continuación un coche deportivo o las chicas chateando con sus
Iphone y te quedas descolocado; no entiendo el motivo de mover de
época la historia ( ¿ por motivos de producción, para ahorrar
decorados y vestuario? ) pero creo que el show hubiera tenido más
fuerza ambientado en los 40 o 50. Ves ese salto temporal y sales
irremediablemente de la historia.
Por lo
demás cuenta con una correcta dirección, donde podemos ver algún
guiño a la obra original ( el voyeurismo en la escena donde Norman
ve a su madre cambiarse a través de la ventana de la casa; el plano
picado en las escaleras donde tendrá lugar la mítica muerte del
policía; una escena de tensión en un lavabo;
como se deshacen de un cadáver tirándolo al mar…) con un
deficiente retrato del niño pero una correcta e interesante
descripción del dúo madre-hijo. Veremos como funciona el meter
historias “ independientes “, otro aspecto discutible, en la
historia ( esa especie de manga erótico que encuentra Norman debajo
de la alfombra y que resulta ser la descripción de un secuestro y
abuso de una joven
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