¿ Hay un más allá ?
Todos estábamos con los cuchillos afilados
esperando ver la nueva ficción producida y escrita por Damon Lindelof después
del final de Perdidos y sus acontecimientos cinematográficos como Prometheus o
Cowboys & aliens , y más morbo había al ver como se había aliado con el
prestigioso canal HBO ( no eres nadie si no has rodado para el más poderoso
canal por cable estadounidense ) para adaptar una prestigiosa novela, al menos
en su mercado de origen, de Tom Perrota: the leftovers. El material de base además daba
para una potencial serie llena de misterio y posibles trucos narrativos pero
debo decir que para el que esto escribe ha resultado ser una de las series del
2014, hasta el momento.
Tras ver el episodio piloto, es más, tras visionar los dos primeros capítulos muchos nos preguntábamos de que iba laserie y hacia donde iría, si seria una mezcla de géneros o entraría de lleno en
el campo de la ciencia ficción, con un argumento muy críptico y personajes
extraños, pero la ficción merece nuestra atención pues, a partir del tercer
episodio, donde se trata la historia de uno de los personajes secundarios,
concretamente el reverendo encarnado pro Christopher Eccleston ( el primer
Doctor Who del relanzamiento del popular personaje británico ) donde la serie
despuntó en niveles de calidad e interés; no será la única vez que se dediquen
episodios personificados en un solo personaje, luego veremos como se trata a
otros personajes como Nora o en el espléndido 1x09 se entra de lleno en como se
vivió el día de la “Ascención “ por los principales personajes, haciendo un uso
inteligente de esa interacción entre episodios de trama y episodios
individuales. Se puede tildar de lenta e inconexa en sus capítulos iniciales
pero poco a poco la serie demuestra su forma de ser y sus virtudes, que no son
pocas. Hay lugar para el drama, la violencia, incluso el amor y la locura ( en
una subtrama que atañe al padre del protagonista, encarnado por Scott Glenn, y
donde por momentos podemos pensar que el protagonista caerá en dicho mal: esas
extrañas cacerías nocturnas de perros o el personaje de, que no es más que el
reverso oscuro del protagonista ).
Así ese hecho extraño que da inicio a la
trama supone una especie de macguffin, donde la historia rápidamente se
convertirá en un drama protagonizado por personas rotas, seres que no saben
encontrar su lugar en la tierra, así como una familia disfuncional dentro de la
desestabilizada sociedad norteamericana; en este sentido la serie me recuerda (
aunque muchos me criticarán por la comparación ) a otra serie de HBO, a dos
metros bajo tierra (2001-2005 ), otra
ficción donde la muerte del patriarca
servía como explosión de los sentimientos de sus protagonistas, además
de que Justin Theroux, el soberbio protagonista de The Lefovers, también
estuvo presente en la serie de Allan Ball, manteniendo una relación sentimental
igual de “extraña” que la que mantiene con Nora ( Carrie Coon ). Por ello aplaudo la dirección tomada por
el show, donde se mantiene los pies en el suelo brindándonos un drama por
momentos estresante y conmovedor a la par que duro ( ojo a la escena de inicio
del capitulo 1x05 ) si bien eso no significa que no haya preguntas que
responder.
La verdad ¿ a cualquier
precio? ¿ Hasta cuando hay que recordar ?
Además del misterio de ese extraño fenómeno
donde desaparece parte de la población, lo más llamativo del show es la
aparición de extraños cultos que servirán como antagonistas de la historia, los Culpables Remanentes ,
como grupo en el cual acabarán
personajes como Meg Abott ( Liv Tyler ), la
propia esposa del protagonista o Patti ( excelente Ann Dowd ), quien en definitiva sirve como ejemplo de
lo que ejemplifica dicha secta. El grupo, que vestirá de un blanco impoluto, no
hablan y no paran de fumar, demostrará y pondrá a debate el peligro de los
excesos creyentes, hasta que punto uno debe mantener el dolor por la pérdida,
llegando a extremos como lo que supone el gran plan que se muestra en el capitulo
final, y que supone la absoluta desestabilización de la sociedad. Por otro lado
la aparición de ese extraño Wayne ( Paterson Joseph) que
estará en contacto con Tom el hijo del protagonista está más desdibujado en
una de las partes de la historia más flojas; “ otro que se cree Dios“, dirán
de él. Aunque hay que mirar el lado positivo: dentro del alto nivel
interpretativo incluso los actores jóvenes no desentonan. Destacar también el
componente sonoro, donde además de un uso dramático de la banda sonora ( hay decenas de momentos donde la explosión dramática viene dada por la música, en escenas sin diálogo ) el
compositor Max Ritcher crea uno de los leit motivs
más impactantes, tristes y bellos de los últimos años
Dos ejemplos del excelente trabajo musical de Max Ritcher; ojo además a esos "polémicos" títulos de crédito, donde se mezclan imágenes religiosas con motivos sexuales.
Un extraño final
Con unas interpretaciones muy destacables y una claridad de ideas interesante la serie, con un gran trabajo de dirección acargo de nombres destacados como Michelle MacLaren ( directora de episodios en Breaking Bad o juego de tronos ) si bien sorprende la recuperación de Mimi Leder ( Deep Impact ), también productora de la serie, en varios episodios clave y donde dirige de una manera sorprendentemente sobria, desemboca en ese episodio crucial que supone el 1x09, donde en un flashback veremos como era la vida de los principales personajes antes de la Ascensión y como vivieron ellos ese día, en un recurso narrativo similar al del terrible film francés Irreversible ( Gaspar Noé, 2008 ) el cual estaba narrado del final hasta el inicio y eso hacia el viaje aún más doloroso. Aún más sorprendente es ese season finale, donde vemos cual es el gran plan urdido por la secta y como se lleva a cabo, si bien dentro del dolor y la tristeza hay un extraño happy ending en esa escena final. Es casi más interesante saber que camino cogerán ahora sus creadores tras este final.
Lindelof ha cerrado bocas: en una época
donde, a pesar del alto nivel cualitativo, las nuevas series apenas llaman la atención o consiguen ser renovadas pero su creador ha conseguido, junto al propio escritor ( ambos se encargan mano a mano de la mayoría de guiones de los episodios ) un show absorbente, inteligente e incómodo, superando sus posibles problemas y dándonos una de las mejores series hasta ahora de este 2014.
The Leftovers aborda un suceso inexplicable, pero lo que más importa son las consecuencias que esto ocasiona sobre la humanidad y de qué manera se enfrentan a ello. Sin duda, la segunda temporada será crucial para varios de sus personajes, y espero no caigan en la repetición de sentimientos y emociones de los mismos.
ResponderEliminarPara mí: EXCELENTE. Una serie que ha cambiado lo que veníamos viendo. Un conjunto IMPECABLE donde las actuaciones, guiones y musicalización crean un TODO digno.
ResponderEliminarClaro que para poder disfrutarlo: hay que ser pacientes. UNICAMENTE al final del episodio 10 -último de la temporada- el rompecabezas será armado y "casi comprendido" Y digo "casi" porque algunas respuestas quedarán sin resolución o bien sólo con alguna vaga idea de lo que pudo ocurrir. Pero eso NO le quita a la serie la calidad, NI al espectador el placer de disfrutarla y por qué no,... sufrir la.
Para mí: EXCELENTE. Una serie que ha cambiado lo que veníamos viendo. Un conjunto IMPECABLE donde las actuaciones, guiones y musicalización crean un TODO digno.
ResponderEliminarClaro que para poder disfrutarlo: hay que ser pacientes. UNICAMENTE al final del episodio 10 -último de la temporada- el rompecabezas será armado y "casi comprendido" Y digo "casi" porque algunas respuestas quedarán sin resolución o bien sólo con alguna vaga idea de lo que pudo ocurrir. Pero eso NO le quita a la serie la calidad, NI al espectador el placer de disfrutarla y por qué no,... sufrir la.