( Crítica ) Gru mi villano favorito 2

Pon un MINION en tu vida y sonríe

 

 

 

Hace unos años, en 2010 concretamente,  Universal sorprendió con Gru mi villano favorito una pequeña cinta de animación que suponía el debut del estudio Illumination Entertainment recién creado por Chris Meledandri, y que bajo la sombra de Pixar y Disney, fue un gran éxito comercial. Años más tarde nos llega la imparable secuela de nuevo dirigida por el mismo equipo creativo, Pierre Coffin y Chris Renaud a la dirección y las voces en V.O. de Steve Carrell, Russel Brand, Kristen Wiig a los que se unen Steve Coogan y Benjamin Bratt.

 

 

La película como no es más de lo mismo pero aumentado, más grande, con más carga de moralina made in Disney ( aunque ésta n te llega a echar de la cinta, aunque hay momentos en que esta a punto ; la frontera que igualmente roza Rompe Ralph, por ejemplo )  excesiva pero también más divertida y lo más importante y acertado: con una mayor aparición de los MINIONS, esos seres amarillos adorables que recuerdan tanto a los Lemmings del mítico videojuego o a los Rabbids de la saga de Rayman, y que aquí tienen un golpe de humor tras otro en sus sucesivas apariciones y no hablemos de los números musicales del final, pequeñas joyas cortas dentro del metraje. Un acierto que ya supuso de lo mejor de la primera cinta y que sus responsables saben el tirón que tienen y se les aumenta la presencia en pantalla, girando parte del argumento directamente sobre ellos.

 

 

 

La parte moralizante sigue estando sobre esas tres niñas y el nuevo papel de Gru como padre, si bien en esta segunda entrega se  introduce el tema del amor, buscando Gru pareja y el soporífero historia de amor de su hija Margo con esa especie de mexicano vestido con chaqueta de cuero y estilo Justin Bieber ( en uno de los peores diseños de personajes vistos en años; pero hay que buscar audiencia de todas las edades....) lo cual esto sirve para introducir a Lucy ( con la voz de la sensacional Kristen Wiig, Patricia Conde en su versión doblada ) una agente de la Liga de Antivillanos tan efectiva como torpe en sus maneras personales. Esta love story sirve tanto para introducir de nuevo esos flashbacks que eran golpes de genio en la primera entrega ( Gru con su sueño de viajar a la luna pero siendo chafado por su progenitora ) y que aquí solo se usa una vez pero de manera igualmente efectiva. Además quiero aprovechar para señalar lo que a la postre y junto a los Minions me parece lo mejor de la saga y es lo bien que los personajes principales se acoplan a los actores que se doblan: es imposible ver a Steve Carrell tras el diseño de Gru ( con su nariz característica ) pero no solo eso pues tanto Gru como sobretodo Lucy cogen las maneras de actuar de Carrell y Wiig, dos de los mejores actores de comedia actuales, podemos ver sus tics o maneras, al ver a Lucy podemos recordar cientos de gags de Wiig en el Saturday Night Live;  es la mayor apropiación de un carácter animado desde que Robiun Williams robara todo el protagonismo de Aladdin ( Ron Clememnts y John Musker, 1992 ) con su histriónico genio. Además la química entre ambos actores es muy eficaz y da momentos e screwball comedy acertados e incluso amorales ( la cita en el restaurante italiano ).

 

 

 

Por lo demás la trama criminal bebe mucho de los Increíbles ( Brad Bird, 2004 ) aunque dando la vuelta al argumento, la parte de espías puede venir a ser como la de Cars 2 aunque en la cinta de Coffin y Renaud mucho mejor tratada y más divertida que la innecesaria secuela de Cars y también la mayor influencia Pixar además del ritmo impuesto en la acción la podemos hallar en personajes como Agnes que recuerda enormemente a Boo de Monstruos S.A.  Luego podemos contar con decenas de guiños post-modernos como esas referencias a Lobezno, la saga Misión imposible o 007, un guiño involuntario como es la presencia de cierto pollo el antagonista me recuerda a Poyo agente secreto de la saga de cómics Chew de John Layman y Rob Guillory ( off-topic: harto recomendable ) que me  pero incluso citando de las mejores fuentes: ojo al gag de la pastelería que repite cierto chiste de la mítica el jovencito Frankenstein de Mel Brooks; la cinta incluso se cita a sí misma repitiendo el gag del doctor Nefario ( presente en la primera entrega ) y hay más carga de humor CACA-CULO-PEDO-PIS; gags y referencias para todas las edades. Por el lado negativo citar la horrible selección de canciones ( por parte de la captación de la audiencia juvenil, no las de los Minions ) pop modernas de gente como David Ghetta o Pigbull , impuestas de manera artificial para captar audiencia juvenil . También citar ese comentario sarcástico de situar la acción en un centro comercial como lugar donde imperan los villanos y surge el mal......

 

 

 

Así después de la eficaz Monstruos University aquí tenemos otro ejemplo perfecto de cine de animación inteligente, atractivo y muy divertido, con sus peros pero con golpes de humor sensacionales, una propuesta atractiva y refrescante.