Ya podemos disfrutar del retorno de Frank
Darabont a la televisión, después de que el popular guionista y director (
Cadena perpetua, la milla verde, la niebla ) se saliera, no sin “polémica” de
The Walking Dead, un show que él puso en pie y que hoy día triunfa, si bien con
no pocas cosas criticables; el punto de vista que quería dar Darabont a veces
se respeta y otras no, pero desde luego la irregularidad ( para un servidor )
de esa serie no es solo por la marcha de su creador, pues éste ya fue uno de
los causantes de muchos de los errores o puntos más criticables de la serie.
Ahora Darabont se encarga de escribir y dirigir una serie con un marcado
carácter de cine negro, una trama llena de policías corruptos, mafiosos, femmes
fatales, humo de tabaco, música de jazz, tiroteos: puro noir.
Darabont nos presenta una trama llena de
todos los clichés del género, empezando con unos actores muy apropiados, por su
físico, mucho de ellos ( OJO SPOILER, para quien no siga al día The Walking
Dead ) salidos de su epopeya zombie como Jon Bernthal ( cuya apariencia física
casa perfectamente con este ) o Jeffrey
De Munn, pero también con un amplio cast formado por Milo Ventimiglia ( Héroes
), Edward Burns ( como Bugsy Siegel ), Neal McDonough ( Justified ), Alexa Davalos ( Furia de titanes ) y
para llamar aún más la atención como special guess star en este piloto contamos
con la presencia de Simon Pegg como el cómico Hecky Nash
.
La historia, que constará de seis episodios,
se dedica a mostrar los Ángeles en los años 40, concretamente 1947, donde
conoceremos a un rudo detective ( Berthal ) a cuyo alrededor tiene tanto a
compañeros del cuerpo de policía como a los más importantes mafiosos de la
época. Como prólogo de cada episodio veremos una escena situada en los años 20,
en la infancia de varios personajes que luego serán protagonistas de la acción.
Darabont se sirve de la descripción de un duro detective, parco en palabras y
extraño en sus acciones, pues a pesar de ayudar a solventar varios problemas de
la mafia se niega a ser pagado por ello.
-
“ Los buenos usan zapatos blancos,
y negros, los malos; yo soy de llevar gris“
Con tal sencilla metáfora, en un guión lleno
de diálogos afinados y afilados, en la mejor tradición del género, las desventuras de dicho agente
de la ley serán el motor de una trama que sirve para conocer el los Ángeles de
la década de los 40, en un ejercicio nostálgico donde la premisa del show es la
de recrear una época y ambientes pasados, pero a su vez recuperar un género y
unas maneras de rodar. Darabont ya quiso recuperar el cine de muertos vivientes
clásico de George A. Romero en su breve paso por TWD, y recordemos su afición
por el cine de género clásico ( su guión no usado para la cuarta entrega de
Indiana Jones contenía invasiones alienígenas ), de ahí que decida realizar un
proyecto a contracorriente y salido de su tiempo, podemos verlo en los
decorados o el vestuario donde, a pesar de un buen acabado técnico (destacar
también la fotografía de David Tatenhall ) el objetivo no es lucir como sí
ocurre en otras ficciones muy parecidas como Boardwalk Empire de HBO, sino el
homenajear y rendir tributo al cine negro de esas décadas. Por eso esta Mob
City es casi una recreación artificiosa (ese plano de la bengala, tan bello
como falso ) de ese tipo de cine, una especie de revivir una época
cinematográfica pasada, más cerca de la imponente L.A. Confidential ( 1997 ) que de la
horrible Gangster Squad ( 2013 ) de Ruben Fleischer donde su intento de ser moderna y
a la vez clásica fracasó). También se hace notar en la interacción entre
personajes, esos diálogos bien trabajados ( muy recomendables aunque no tan
profundos como los de clásicos como tener y no tener, el halcón maltés y tantas
otras; se invoca directamente a James Cagney y su Al rojo vivo ) y en unos
actores que funcionan mejor como arquetipos ( el policía duro, la mujer fatal,
el mafioso psicótico ) si bien destacan más los del bando fuera de la ley como
ese grupo de mafiosos liderados por Bugsy Siegel ( que fue encarnado antes por
Warren Beatty en Bugsy de Barry Levinson ) y donde destaca esa pareja formada
por Robert Kneeper ( Prison Break ) y Richard Brake ( Batman Begins ).
Como parte moderna destacar la introducción de un fino sentido del humor que
funciona muy bien ( el coche que no arranca en el tiroteo del prólogo; el
símbolo de cura de o el bote de queso en
el tiroteo en el restaurante italiano ).
Mob City no inventa nada, es una nueva vuelta
de tuerca de ciertas maneras de entender el cine de género negro; muchos
criticaran su artificialidad en su puesta en escena, actores y acabado técnico,
pero creo que la propuesta de Darabont es una entretenida puesta al día de un género que tuvo gran furor años atrás y hoy
ha sido pervertido de manera deficiente. El viejo estilo puede ser el más
moderno, si se trata bien. también creo que será mejor ver la propuesta en su
integridad, pues solo son seis episodios y, tal como está montada, es mejor
considerar el show como una película larga de género más que como una
miniserie, veremos que tal el resultado final aunque de momento confío en Darabont
y su mirada sobre el género.
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