lunes, 5 de mayo de 2014

( Series ) ( Crítica ) Juego de tronos 4x05 First of his name

Decisiones vitales
 
 
 
Juego de tronos, a pesar de su apariencia de historia fantástica, con un ancla fuertemente unido con la realidad, y obra decidida a causar estragos entre el aficionado a la fantasía y el género puro y duro, está demostrando en esta cuarta temporada que es una serie política; sí, tenemos lobos gigantes llamados huargos, una joven reina que tiene tres dragones como hijos o un lisiado que puede entrar en las mentes de animales y personas, pero aún así la serie capitulo tras capitulo demuestra un tono adulto y mucho más profundo de lo que puede parecer a priori, pues estamos ante un relato sobre el poder y todas las armas que existen para conseguirlo, bien sea el dinero, la información o...el sexo. Con una amenaza profunda de fondo ( como Mance Ryder es nombrado en cada episodio, pero apenas ha aparecido en la serie, aunque su entrada causará gran impacto - o eso esperamos - ) la historia se va desarrollando a base de unos personajes que buscan su beneficio propio en primera instancia, y definitiva, porque muchos hablan de honor para sus casas pero el beneficio individual está ahí, es su motor para actuar y maquinar esos planes enrevesados en ciertos casos, cocinados a fuego lento y con paciencia, como demuestra todas las tretas llevadas a cabo por ese maestro del engaño que es Lord Meñique.
 
Con un nuevo rey en Desembarco del Rey, el primero de su nombre como reza el acto, veremos como Tommen I toma posesión de su corona, la cual parece estar destinada a demostrar un futuro incierto y negro, como ha sucedido con sus antecesores, pero el cargo está cogido y ya vemos como Margaery rápidamente quiere aprovecharse de ello ( esas miradas que intercambian durante el evento ) mientras que Cersei parece que también apoyará esa unión, siempre  a su debido tiempo ( tenemos el cadáver de Joffrey aún caliente...) a la vez que la, de momento, reina, busca el favor de su padre ( y de otros miembros del tribunal: como apela al dolor y amor por una hija ausente ante Oberyn Martell ) para acabar con la vida de Tyrion.
 
 
 
Sansa ha conseguido huir gracias a Meñique, y se dirige al Nido de Águilas para reunirse con su tía Lysa, hermana de su fallecida madre Catelyn, pero parece que ha dejado una cárcel por otra pues allí descubrirá los planes de su celosa tía hacia ella ( como la ve como una amenaza para con su futuro marido ) y los planes futuros para unirse en matrimonio con su primo mientras descubrimos como ciertos eventos ocurridos en Poniente tienen la firma de Meñique.....
 
 
 
En Meereen la Madre de dragones y Rompedora de cadenas deberá aprender a gobernar, pues a pesar de tener ya disponible una flota y poder atacar Desembarco del Rey, las ciudades que ha liberado con anterioridad han sido reconquistadas y deberá ver si avanza hacia Poniente dejando atrás su posible legado o cumple con su ideal de libertad y así lo decidirá ante ser Jorah, el cual parece volver a ser su hombre de confianza.
 
En los caminos de Poniente tenemos a dos parejas diferentes pero que nos dan excelentes momentos como son esa especie de Don Quijote y Sancho Panza formados por Brienne y su nuevo escudero los cuales se dirigen al Muro; y Arya y el Perro, los cuales parecen que no pueden estar el uno sin el otro a pesar de sus diferencias: como ella recita su oración para sus futuras muertes y desvela que la última será el propio Perro o como éste le enseña varios secretos sobre la lucha, más allá de esa Danza del Agua que practica la joven Stark.
 
 
 
El grupo de la Guardia de la Noche se infiltra definitivamente en el Torreón de Craster, si bien el infiltrado de los Bolton intentará hacerse con Bran pero éste lo evitará usando sus poderes y entrando en el cuerpo de Hodor, el cual hará uso de su enorme fuerza y corpulencia, a la vez que su libertad le lleva a decidir si quiere ir en busca del cuervo de tres ojos ( con esa visión futura que también ha visto el joven Reed ) o reunirse con su hermanastro Jon Nieve. El fuego purificará ese infierno en la tierra que fue para las mujeres de Craster su torreón, ante la mirada de Jon y sus compañeros.
 
 
 
Un episodio continuista, quizás el más flojo visto hasta ahora de la temporada, si bien eso no es negativo, pues hay ciertos puntos de interés en el mismo: con momentos de batalla presentes ( recordemos que estamos ante una serie con alma épica, y escenas así se echan de menos, citar como la toma de Meereen fue algo descafeinada en ese momento elíptico en el anterior capitulo ) y esas estupendas escenas con cierto tono fantástico ( la bella visión del Árbol de los Dioses o la ocupación del cuerpo de Hodor por parte de Bran, la cual da el momento de gloria para este personaje ) el episodio destaca por ver como en verdad estamos ante una serie política como comentaba al inicio del escrito: los planes de Meñique para conseguir poder, que se remontan a tiempos pasados, viendo como camela a la enferma Lysa Arryn para que actúe en su beneficio; las conversaciones entre Cersei y su padre ( recordando cuanto odia éste a Tyrion ) o la Víbora Martell ( apelando al sentimiento ) o ese cruce de miradas en la primera  escena, cuando vemos miradas cómplices entre Tommen y Margaery y como Cersei se interpone entre ellas... Incluso Daenerys aprenderá que gobernar no significa liberar pueblos esclavizados y seguir adelante, sino que hay que tomar decisiones y aguantar lo conseguido. De este modo la serie demuestra su carácter profundo, no es solo una historia dirigida a los freaks amantes de la fantasía y los materiales de género sino que, como todo buen relato de género usa el mismo para hablar con profundidad de temas más universales.
 
 
 
Dirigido de nuevo por Michelle MacLaren, el episodio está lleno de momentos de humor como la noche de bodas de Lysa Arryn y Meñíque o todas las escenas con Brienne y Podrick Payne, que hacen aún más grande a este personaje secundario.






LA PROMO: Episodio 4x06 The Laws of God and Men



No hay comentarios:

Publicar un comentario