Tengo que reconocerlo: a pesar de que fui uno
de los pocos, al parecer, que criticó el piloto de esta adaptación a miniserie de la popular y excelente película de los hermanos Coen, debido a diversos
motivos, ahora me tengo que tragar mis palabras y reconocer que Fargo – la
(mini) serie ha sido la sorpresa del 2014 hasta ahora y una de los shows más
completos del año presente junto a True Detective . Toda una novedad, que
sorprende tanto por la vuelta de tuerca que se le da al particular universo del
thriller de los Coen así como las ideas claras de su principal creador, el
joven Noah Hawley ( The unusuals, Bones).
El piloto me resultó algo reincidente en base
a que veía como intentaban imitar el personal tipo de humor ejercido por Joel y
su hermano Ethan en su filmografía, así como el propio piloto duraba
prácticamente lo mismo que la cinta que versionan y contaba menos; ¿ es eso
cierto? en el mismo ya veíamos apuntes de que el argumento iba a ser fiel, a su
manera, a la cinta del 1996 y a la vez novedosa, pero es a partir de su cuarto
episodio cuando vemos como de verdad Fargo-la serie busca su camino y crea una
nueva ficción, eso sí, citando la anterior: podemos ver personajes similares
como el de la policía embarazada ( si bien este estadio físico tardará en
aparecer a partir de cierto salto temporal ejercido en una soberbia elipsis y
muy arriesgado en el punto de la serie en que se realiza ) o la gente de pocas
ideas que parece vivir en ese nevado pueblo de Minessota; cada episodio
comienza con esa leyenda de “ basado en una historia real, los nombres de los
supervivientes han sido cambiados por respeto”, etc etc si bien todos sabemos
que ya la película de los Coen NO se basaba en ningún caso real y todo era una
artimaña para darle más empaque a la cinta, otro ( particular ) chiste de los
Coen para con su audiencia. Incluso hay una trama ( la del maletín con el
dinero ) que se recupera en la serie y que da lugar a un debate curioso sobre
la naturaleza de la ficción televisiva, pero más allá de eso la serie encuentra
su camino y, con las mismas o similares armas que la premiada cinta
protagonizada por Frances McDormand, nos propone un thriller negro y moral, a
su manera, un relato sobre la naturaleza del ser humano y su afán de poder, una
búsqueda de la felicidad de las maneras más insospechadas aunque sea pactando
con el propio diablo ( ese Lorne Malvo, desde ya uno de los personajes del año
y que felizmente recupera a Billy Bob Thornton ( 1 ) ).
¿ Secuela, precuela o ambas
cosas ?
He citado ese maletín, el cual fue enterrado
en la película ( ambientada en 1986: quedaos con este dato ) y recuperado ahora
, en el 2006, bueno en un flashback que nos introduce al magnate de ascendencia
griega Stavros Milos ( El siempre genial Oliver Platt, The Big C ) y que dará pie a
una extorsión usando una recreación de las plagas de la Bíblia en un apunte
satírico sobre las creencias extremas religiosas. Entonces ¿ esta cita o
recuperación argumental de ese maletín que significa? La serie es una precuela
, una secuela o ambas cosas, ahí está el debate si bien ambas encajan en un
efecto narrativo similar al de la segunda entrega de 300: el origen de un imperio ( Noah Murro: por
favor, huid de ella ) por ejemplo, lo que nos daría pie a pensar que es una
secuela citando un elemento pasado y a su vez una nueva historia con elementos
originales y citas claras a la película. esto hace que la serie sea similar en
su narrativa a la de otra grandiosa adaptación de un universo y una(s)
película(s) como es Hannibal de la NBC: ambos shows recrean a su manera una
historia conocida aportando nuevos personajes y tramas argumentales, si bien
hay citas MUY CLARAS al material de base. Desde luego se trata de las dos
mejores adaptaciones de una película a serie, ahora que esa tendencia está a la
alza (siguiendo la política remakeadora de Hollywood ).
Una serie visual pero también de personajes
La comparación con el Hannibal recreado por
Bryan Fuller no es casual, pues ambas series cuentan con el mejor acabado
sonoro y visual de la parrilla actual, demostrando que la frontera entre cine y
televisión es cada vez más frágil; la fotografía, las escenas de acción (
escasas, pero atractivas: ese tiroteo en off visual en el edificio del episodio
es el mejor ejemplo: la mejor escena del año junto al plano secuencia de TrueDetective ) o esa banda sonora, tan deudora e igual de sugerente que la
creación de Carter Burwell en la película dan un empaque soberbio al show de FX.
Pero ante todo hay que aplaudir el guión, que sabe crear una nueva historia a
partir de la cinta y darle un nuevo enfoque, con escenas excelentemente
escritas como la huida del hospital por parte de Lester Nygaard ( un Martin Freeman
reinventándose ), los interrogatorios, la escena del hotel o la situación en
las Vegas, después de ese salto temporal que en cualquier otra serie hubiera
sido signo de muerte y aquí está excelentemente resuelto y le da una nueva
dirección en su parte final.
-
“ Lester, ¿ esto es lo que
quieres? ¿ es lo que quieres, Lester ?
Pero la serie demuestra su poderío en la
creación de personajes, desde esa agente de policía novata, Molly Solverson ( que tanto recuerda
al personaje de McDormand ), su
padre interpretado por el siempre
correcto Keith Carradine o Colin Hanks ( salvando la horrible interpretación, o mejor
dicho, horrible personaje, que tuvo en la sexta temporada de Dexter ) o el ya
citado Oliver Platt; incluso esa pareja de asesinos a sueldo ( con el ¿primer?
asesino sordomudo de una ficción ) o esos dos agentes del FBI que no lo ven
venir ni teniéndolo delante pero dos personajes sobresalen por delante de todos
: Lester Nygard y Lorne Malvo.
Lester Nygaard parecía una recreación del
personaje interpretado por William H. Macy, un perdedor al que nada la salía
bien en su vida, y el contratar a Martin Freeman ( Sherlock, El Hobbit )
parecía ir en la misma dirección, incluso su papel en los primeros episodios
llamaba a esa definición pero la evolución del personaje ha dado pie a uno de
los mayores hijos de puta (así, con todas la letras) de la televisión reciente,
otro personaje gris como los protagonistas de Los Soprano o The Wire, si bien
aquí llega a ser un antagonista como en ciertos aspectos se podría considerar a
Walter White de Breaking Bad ( 2 ): la escena del episodio 1x09 con su nueva
esposa es el mejor ejemplo. Freeman es capaz de, con su estilo, crear un
personaje que pasa de ser afable y callado, ser un maquinador perverso que es
capaz de cualquier cosa con tal de salvar su pellejo.
Pero Lester, y el resto de personajes, son
simples marionetas ante ese ser superior de extraño origen y que pondrá patas
arriba todo: estamos hablando de Lorne Malvo ( Billy Bob Thornton ), un asesino
a sueldo que trabaja para la mafia aparentemente pero que en verdad trabaja
para él mismo, que será capaz de llevar adelante una extorsión de la manera más
“creativa” y cruel posible así como hacer cambiar a todo aquel que se relacione
con él, desde Lester hasta el agente de policía
( Hanks ). Tanto la creación del personaje como la actuación de Thornton
( ojo a su manera de andar, medio encorvado ) hacen de esta especie de Diablo
en la tierra ( ya comenté el comentario religioso de la serie ) una de los
personajes más llamativos y definitivos de este año, y de muchos más.
Una miniserie que pasa a
serie
Fargo así consigue salvar las reticencias que
había contra ella al adaptar una película tan sobresaliente ( si es mejor la
serie o el film, es una discusión aparte: ambos tienen grandes alicientes en
sus campos respectivos; espero vuestras opiniones ) creando una serie nueva que
sabe citar a su fuente a la par que crear una nueva historia y personajes
llamativos, con un empaque argumental muy bien construido y con todo cerrado en
ese correcto pero quizás demasiado consecuente final para una miniserie de 10
episodios que, ante la recepción crítica y de la audiencia, ha recibido
confirmación para una segunda temporada, donde habrá que ver por donde transita
el show; desde luego, razones para confiar hay en esta “nueva” Fargo.
( 1 ) El ex marido de Angelina Jolie es otro
de los habituales de los Coen, para los que protagonizó la extraña y onírica el
hombre que nunca estuvo allí ( 2001 ) ; por cierto, los propios
hermanos Coen son productores de la serie y han dado el visto bueno a la
adaptación.
( 2 )
La cita a la serie de AMC tampoco es gratuita, pues además de contar ambas
series con un desarrollo de personajes en unos límites morales muy difusos,
tenemos a Bob Odenkirk ( Saul Goodman ) como actor.
Si bien la mayoría de los críticos consideran la actuación de Billie Bob Thorton (Lorne Malvo) como la mas destacada de esta primer temporada, en mi opinión Martin Freeman (Lester Nygaard) es quien debería llevarse todas las menciones de honor....hace excelente los dos perfiles, empezando como un pobre reprimido sin caracter, hasta convertirse en un personaje frío, calculador, manipulador y capaz de hacer lo inimaginable por salirse con la suya. De cualquier manera, Thorton hace un muy buen trabajo (muy expresivo con la cara).
ResponderEliminarMuy mala la serie
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