Resumen de la 70ª gala de los Globos de Oro

Una gala politizada, con estrellas, mucha (demasiada ) bebida y pequeñas sorpresas

Parece ser que la gala de los globos de oro de este año quieren llevar la contraria a sus premios mayores, los Óscars, pues encumbraron a Argo de Ben Affleck, dándole los premios a mejor película en drama y mejor director; galardón que no podrá repetir en los Óscars, pues él (al igual que Kathryn Bigelow, Quentin Tarantino o Paul Thomas Anderson no optan a la estatuilla a la mejor dirección). Dias después de saberse que Affleck (con una carrera como director con sólo tres títulos, pero todos harto interesantes) no optaba al Óscar, su film triunfó en los Critic’s Choice y la madrugada del domingo al lunes hizo lo propio en los Globos de Oro. A su vez hubo varias decisiones cuanto menos discutibles en los premiso de televisión, donde Homeland y Game Change volvieron a arrasar en sus respectivas categorías mientras que hubo un relevo en comedia, entrando el drama (porque es lo que es: UN DRAMA) generacional de HBO Girls con el premio a la mejor comedia y mejor actriz para su creadora, Lenna Dunham (una de las actrices más comentadas de la noche, por su estilo físico y sus andares; ¿qué llevaba debajo del vestido Lenham?).

Reunión surrealista; ¿os imagináis una futura colaboración conjunta?

El palmarés completo lo tenéis aquí.

Fue una gala muy política, pues varias de las películas y series que competían tocaban de lleno varios temas de la historia pasada y presente de Estados Unidos como Lincoln de Steven Spielberg (con su clip presentado por el mismísimo ex presidente de USA Bill Clinton, toda la platea en pie e intercambio de gesto cómplices entre Clinton y Spielberg por ejemplo; Amy Poehler, copresentadora de la gala, estuvo rápida al decir: “acabo de ver al marido de Hillary Clinton” – recordar que el personaje de Poehler en la excelente sitcom Parks & Recreations, Leslie Knope, es una fanática de Hillary-) ; La noche más oscura de Kathryn Bigelow; Argo de Ben Affleck (con presencia de Tony Méndez, el agente que se encargó de esa misión tan surrealista como real), Homeland o Game Change. Otras cintas con carácter histórico podrían ser Django desencadenado de Tarantino (que ganó dos premios gordos) o la miniserie de History Channel Hattfields & McCoys (con premio para su serio protagonista Kevin Costner; ya puestos a elegirlo, él está tan bien como su coprotagonista Bill Paxton, creo que deberían ir de la mano compartiendo premio) .

Las presentadoras de este año fueron las ex SNL Tina Fey (nominada por la última temporada de Rockefeller Plaza) y Amy Poehler (que sigue siendo ignorada por Parks & Recreations). Ambas estuvieron sensacionales en una gala donde el presentador se limita al monólogo inicial y pocas participaciones más, si bien las actrices se guardaron unos ases en la manga, como aparecer disfrazadas en las categorías de mejor actor y actriz secundaria de TV en personas irreales.

En serio, ¿ qué hago yo aquí?

Su entrada en escena fue muy aplaudida, con varias sentencias sangrantes y que hicieron olvidar rápidamente al cómico Ricky Gervais (“técnicamente no está en el mundo del espectáculo”, dijo de él Poehler).

Chica peculiar, esta Lena Dunham

“Celebramos el éxito de las series que han entretenido al público a lo largo del año y de las películas que llevan dos días en los cines”

El elenco de Modern Family no reaccionó bien ante la enésima derrota de Sofia Vergara

Una de las frases más incómodas y a la vez aplaudidas fue cuando se hizo mención a la polémica de La noche más oscura y sus escenas de torturas : “No entraré en la controversia sobre las torturas pero confío en la persona que estuvo tres años casada con James Cameron”. Cara de circunstancias en varias mesas y sonrisa de Bigelow.

Otro de los momentos más aplaudidos fue la referencia a Anne Hathaway, que ganó el premio a la mejor actriz secundaria por Los miserables (y a la que ya deberían haberle dado el Oscar, seguro, para ir ahorrando tiempo en la gala) cuando hablaron de su famoso solo en el musical de Tom Hooper: “Anne nunca estuvo tan sola como en la gala de los Óscars al lado de James Franco“. O a Quentin Tarantino, el cual iba un poco bastante pasado de alcohol: “es la estrella de mis pesadillas sexuales“.

La gala fue, como siempre, irregular soporífera/deslucida con pocas sorpresas y aciertos; el resumen perfecto podría ser la cara de circunstancia de Tommy Lee Jones el cual fue enfocado en repetidas ocasiones por la dirección de la gala; a saber que estaría pensando. Salvo algún acierto ocasional, como la acertada presentación de Kristen Wiig y Will Ferrell en un gag muy Saturday Night Live, o momentos surrealistas como la entrega del premio a la mejor película de habla no inglesa a Michael Haneke (el cual rompió su tradición de no hablar inglés en la recogida de premios; ¿campaña de cara a los Óscars? ) a manos de Rambo y Terminator o sea, Sylvester Stallone y Arnold Schwarzenegger (“nunca pensé que un austriaco me daría un premio en Hollywood”, dijo Haneke). El largo discurso de Jodie Foster, donde recogió el premio honorífico de manos de Robert Downey Jr. y donde parece que confesó entre líneas varias cosas (“tengo 50 años y soy soltera; tengo una Modern Family“; vamos, reconociendo su homosexualidad) además de que declaró que a partir de ahora se dedicará a la dirección. Otros momentos divertidos fue la lectura de las nominadas a mejor actriz de comedia en TV con las presentadoras nominadas: Tina Fey cogida de manos a J-Lo mientras Amy Poehler no perdía en tiempo en el regazo de Girgio Clooney… momentos después de perder con la “universitaria” Dunham ambas aparecieron en la platea con copas llenas para paliar su derrota. La actriz Glenn Close entró en la broma, como podéis ver:

Adele ganó por la canción de Skyfall

Y es que estos premios no se pueden tomar en serio pues los da una asociación cerrada de 78 periodistas freelance que ACEPTAN SOBORNOS con tal de que ciertas películas estén nominadas; recordad el caso de The Tourist o, ¿qué hacía este año nominada como mejor comedia La pesca del salmón en Yemen?

Y es que sus decisiones son, cuanto menos, curiosas y/o polémicas; no hay más que mirar el palmares de televisión, que parece un calco del los Emmy exceptuando esa (alegre) sorpresa con Girls pero, ¿Don Cheadle mejor actor de comedia por la intrascendente House of Lies por encima del maravilloso Louis C.K. de Louie? ¿¿ EN SERIO??

El mejor resumen posible lo dijo la actriz Jennifer Lawrence, merecida ganadora del premio a la mejor interpretación femenina en comedia por el lado bueno de las cosas: "Gracias a Harvey Wenstein por asesinar a quien tenga que haber asesinado para que yo esté  aquí".