(Crítica) Black Mirror 2x03 The Waldo moment

La política es un chiste

ATENCIÓN: El siguiente artículo contiene SPOILERS, avisados estáis

Último episodio-historia que cierra esta tan polémica como discursiva y abierta al debate segunda entrega de  episodios entorno al abuso de las nuevas tecnologías y su influencia en la sociedad actual, en una "temporada" ( pues las historias son auto-conclusivas y no sé si catalogar a la obra creada por Charlie Brooker como serie en su concepción ) donde el discurso político en sus dos historias finales ha estado muy presente, tanto su visión de la justicia en el anterior episodio como del propio mecanismo de la democracia con este satírico a la vez que triste The Waldo moment.

En un popular show de noticias satírico ( un poco al estilo el intermedio del Gran Wyoming o los programas de David Letterman, Jay Leno o cualquier presentador de Estados Unidos) vemos como una de sus secciones está protagonizada por un oso mal hablado y soez de nombre Waldo. En una de sus entrevistas ataca al político de l partido Conservador , el cual será el próximo candidato al Parlamento por ese distrito. Los dueños del canal televisivo, en vistas del éxito de Waldo, tienen la idea de presentar a éste como candidato a dichas elecciones, a pesar de que no tiene un programa político propio y sus armas son atacar a los rivales con lenguaje soez y directo. A su vez, nos describen los dramas de Jamie Salter ( Daniel Rigby ), el cómico tras el dibujo animado Waldo y de la joven y ambiciosa Gwendolyn Harris ( Chloe Pirrie ), elegida candidata por el partido Laborista, donde uno está escondido y ahogado por le éxito del cartoon y la otra verá como dicho personaje acaba con su incipiente carrera política.

El episodio, de discurso claro pero desarrollo desigual en tanto sus personajes no están del todo bien desarrollados como deberían, nos da una visión extremadamente negra y satírica del mundo político actual, donde un personaje inexistente y sin un mensaje definido, por no decir sin ideas ni propuestas, es capaz de convertirse en una fuerza política votada por personas que no creen en los políticos. La ironía del capítulo es desasosegante  en cuanto parece decirnos que la población cree más en un personaje de imaginación que solo sabe atacar con insultos y sin proponer debates, menudo discurso sobre la inteligencia del ser humano, ¿ o es un ataque contra los programas televisivos y su influencia en el pensamiento de la población? De todas maneras el mundo político no sale bien parado, ver ese extraño personaje norteamericano que viene de la "agencia" y que convierte a Waldo en un ser extremadamente poderoso a nivel mundial en el clímax del episodio.

El ataque al mundo político está ahí, si bien creo que es demasiado directo y a la vez poco desarrollado, se implanta la idea y poco más. En cambio aprecio los pequeños detalles de drama humano, como la soledad del humorista que está escondido bajo el éxito de un personaje al que dobla ( esa escena de la llamada telefómica donde llama a alguien, desconocido, pidiendo apoyo moral pues está a punto de derrumbarse ) y a la vez la ambición de la joven política que espera como inicio conseguir experiencia política en su nominación por el partido laborista y que es la única que conoce realmente al verdadero ser humano tras el dibujo en su fugaz relación amorosa con Jamie. Cortos momentos de drama humano en esta historia cargada de mala uva, si bien desigual en cuanto a la comparación con los anteriores episodios.

En el clímax se vuelve a usar el montaje paralelo entre los títulos de crédito finales y el futuro al cual Waldo se convierte en un personaje mediático y poderoso a nivel mundial mientrs Jamie, quien lo creó e insufló "vida" se ve desamparado en las calles como un vagabundo. Aún así no tiene la misma fuerza dramática que en el anterior episodio.

Destacar la presencia de Jason Flemyng, habitual del cine de Guiy Ritchie y Matthew Vaughn como el propietario de la cadena y que es capaz de destruir la carrera de la persona humana  tras su mayor éxito con tal de alcanzar más poder mediático.

Una historia muy mordaz, si bine no tan bien acabada y resuelta como los anteriores dos capítulos  aún así el debate vuelve a estar ahí, pocas series o ficciones pueden decir lo mismo y provocar el interés o el odio de las audiencias  provocar sentimientos y pensamientos, el mejor alago posible para las transgresoras e interesantes historias urdidas por Brooker y su equipo. Esperamos que haya más en el futuro, por favor.

¿ Cual ha sido vuestra historia favorita de esta segunda tanda de Black mirror?