The Walking Dead ha trenido un estruendoso éxito del estreno de su segunda temporada, con unas cifras de 7,3 millones de espectadores en la premiere de su segunda temporada, con un más impresionante aún 3,8 en la franja demográfica (adultos entre 18-49 años), acumulando más de once millones en las tres emisiones que AMC realiza del nuevo capítulo en la noche de los domingos. Unos datos que además ha mantenido relativamente en la segunda emisión del año, con casi siete millones de espectadores totales y bajando sólo dos décimas en las demos.
Es por ello que la cadena rápidamente ha dado luz verde a una tercera temporada, aunque no ha especificado cuantos episodios tendrá esta nueva sesión ( recordar que la primera temporada tuvo seis episodios y esta segunda tendrá 13, en dos tandas).
Nos alegramos por su renovación, pues ya hacía falta una serie de género de calidad, a pesar de su polémica adaptación del genial (de verdad, obra maestra del cómic) The Walking Dead de Robert Kirkman, y los problemas aparecidos durante esta segunda temporada (el despido de Frank Darabont como showrunner, el recorte de presupuesto,etc).
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