(Cine) (Críticas) Transcendence

Fundamentos excesivos

El cine de ciencia ficción muchas veces ha sido usado como metáfora para transmitir mensajes de diferente índole como los problemas sociales o historias humanas en toda su variedad de sentimientos, a diferentes escalas y con resultados desiguales; por ello el material de género es muy profundo, cuando se utiliza bien, o ignorado cuando no se sabe ver cual es el verdadero mensaje tras la capa de elementos del género o sus efectos visuales u otros campos específicos. En los últimos años muchos cineastas han decidido dar por iniciada su carrera como director de largometrajes entrando en el género puro ( Darren Aronofsky con Pi, fe en el caos; Spike Jonze con Cómo ser John Malkovich; Duncan Jones con Moon; Shane Carruth con Primer; James Ward Byrkit con Coherence ) algo arriesgado si no tienes las ideas claras y más con la inexperiencia cinematográfica.

Algo muy similar le ha ocurrido al oscarizado director de fotografía Wally Pfister, habitual de la cinematografía de Christopher Nolan ( quien ejerce como padrino de la cinta, así como en la contratación del interesante cast ). Pfister, bajo un guión de Jack Paglen, debuta como director con una cinta ambiciosa, “arriesgada” pero que acaba siendo tediosa, fallida y vacía.

La cinta trata sobre el doctor Will Caster( un insuficiente y desaparecido Johnny Deep ) y su esposa Evelyn (Rebeca Hall, quizás la única intérprete a la altura de las expectativas) quienes están creando vida artificial y proponen salvar todos los males de la sociedad, pero tras una conferencia para conseguir inversores el doctor es herido de muerte en un atentado terrorista perpetrado por un grupo liderado por  Bree ( Kate Mara ). El doctor morirá pero su alma quedará instaurada, “viva” en Internet, donde a través de unas instalaciones situadas en un pueblo de mala muerte comenzará a conseguir sus propósitos de mejorar el ecosistema, las enfermedades y otros males mediante nanotecnología pero pronto su ego crecerá y sus ansias de poder le llevarán a conseguir un ejército y poner en jaque al mundo entero, mientras su esposa ayudada por  Max Waters ( Paul Bettany ),Joseph Tagger ( Morgan Freeman, haciendo de…Morgan Freeman ) y el agente del FBI  Buchanan ( Cillian Murphy ) intentarán pararle aunque a un gran precio.

Transcendence quiere ser una epopeya de ciencia ficción con un trasfondo profundo y tocando grandes temas, pero se queda en nada debido a la indefinición de un guión lleno de agujeros argumentales, con un dibujo de personajes penoso, totalmente planos y nada trabajados, donde en ningún momento sentimos empatía por los protagonistas, como ese matrimonio, y por lo que el giro final no funciona pues lo que has presentado como el gran antagonista, un “ser” cuyo ego le lleva a crear un ejército de sueprhombres pero que se redime por amor, cuando en ningún momento se ha trabajado ese aspecto, todo es muy precipitado y mal narrado. La propia idea del matrimonio está expuesta de una manera demasiado clara, pero sin profundizar en la misma, no entendemos lo que son capaces de crear o lo que buscan en sus investigaciones en una historia que quiere ser profunda pero se queda en una simple exposición de ideas sin desarrollo, apuntadas pero en ningún momento tratadas. La misma indefinición se da en el dibujo de los personajes desde el protagonista, el cual a los pocos minutos “desaparece” de la acción ( en una decisión aparentemente arriesgada ) el cual se quiere crear un villano indestructible pero que acaba siendo redimido por su amor hacia su pareja, siendo nada creíble en ninguno de los dos aspectos, o toda el cuerpo de secundarios que solo están ahí para aparentar ser una cinta importante por la categoría de los nombres y para que Nolan los contrate en su próxima película, si bien sus personajes son bochornosos; el mejor ejemplo es esa líder terrorista encarnada por Kate Mara….

Pero lo peor es que, teniendo detrás de las cámaras a un experimentado director de fotografía que ha demostrado como se puede hacer un cine comercial con un gran acabado visual ( el mejor exponente es su labor en El caballero oscuro ) la cinta peca de un estilo visual plano y nada trabajado, una narración inconexa y deficiente igual que la descripción de sus personajes; la fotografía es extraordinariamente sencilla y decepcionante, en un film que quiere ser una obra de arte y ensayo (en su declaración e intenciones y en su argumento, si bien no es nada original, pues es una perversión de la creación de Skynet en la saga Terminator como mejor comparación; si bien también podemos citar Matrix o la serie de televisión Revolution, aunque para entender los (d)efectos de la tecnología en la sociedad nada mejor que ver la serie inglesa Black Mirror) a la vez que gran epopeya post-apocalíptica ( su prólogo y clímax final ) pero la mezcla de intenciones no surte efecto y nos encontramos con la obra de un primerizo mal narrada, montada y fotografiada y que no sorprende en ningún momento. Una serie B con reparto de gran blockbuster pero sin alma ni sentimientos, un film vacio y tedioso, otra decepción más de este 2014.